Hola amigos alienígenas!.
Este año ha sido muy extraño, quizá el más extraño que he visto pasar... creo que vale la pena recapitular sobre él. Puede ser también una buena manera de que conozcan un poco más al autor de este blog, así que vamos a contar que tal me fue en este año que muere ya... No te vayas 2012... has sido tan corto...
sábado, 29 de diciembre de 2012
lunes, 3 de diciembre de 2012
Bajo la misma estrella - John Green
Algunos infinitos son más grandes que otros infinitos.
A veces odio los libros del “chico conoce chica” porque suelen ser muy insulsos y repetitivos para mi gusto. Asumo que una historia no debe, por nada del mundo, parecerse a lo cotidiano, pues suficiente tenemos con nuestras vidas y la gente con la que hay que cargar, para llevar la misma carga en la ficción.
Hay ocasiones en que un autor decide coger un género, y darle un toque personal. A veces sale bien, a veces sale mal. En el caso que nos preocupa, podía decir que esta historia trata de unos personajes de 100 en una historia de 40. “Bajo la misma estrella” es un relato sobre la vida y la muerte, y del como dos personas se conocen, aun sabiendo lo efímero que puede ser ese encuentro, con unos personajes dignos de merecer más de un libro, una historia que bien pudo ser más grande bajo riesgo de que los protagonistas hubiesen dejado de ser ellos mismos. Bueno, al fin y al cabo, es una buena historia que contar.
Detesto cuando las portadas llevan citas o referencias externas... que se puede hacer, si hasta la portada era bonita... |
Hay ocasiones en que un autor decide coger un género, y darle un toque personal. A veces sale bien, a veces sale mal. En el caso que nos preocupa, podía decir que esta historia trata de unos personajes de 100 en una historia de 40. “Bajo la misma estrella” es un relato sobre la vida y la muerte, y del como dos personas se conocen, aun sabiendo lo efímero que puede ser ese encuentro, con unos personajes dignos de merecer más de un libro, una historia que bien pudo ser más grande bajo riesgo de que los protagonistas hubiesen dejado de ser ellos mismos. Bueno, al fin y al cabo, es una buena historia que contar.
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